En el Espanyol desde el 2001, Coro se ganó el cariño de la afición perica en la final de la Copa del Rey del pasado año, en la que anotó el tercer gol del Espanyol, el tanto de la tranquilidad cuando el marcador era favorable al conjunto de Lotina (2-1). Los blanquiazules acabaron levantando la Copa, con un resultado final de 4-1. Coro estuvo sensacional en el encuentro.
Pero su mejor gol llegó en la última jornada de Liga, ante la Real Sociedad en Montjuïc. El cuadro blanquiazul se jugaba la permanencia en la máxima categoría. Con 38 puntos, el Espanyol debía vencer a los 'txuri-urdin' si no quería caer al pozo de la Segunda División. La victoria del Alavés ante el Deportivo les colocaba en la categoría de plata, pero Coro, en el 91', consiguió el gol que valía una permanencia.
Y en la noche de ayer, en Bremen, el de Banyoles logró un tanto decisivo. El Werder Bremen se adelantó en el cuarto minuto de partido, y los fantasmas del '88 comenzaban a rondar por los recuerdos de los pericos. Aunque los germanos debían anotar dos goles más para empatar la eliminatoria, los nervios tuvieron cabida durante toda la primera mitad. Pero de nuevo, Coro trajo la tranquilidad a los hombres de Ernesto Valverde, en el minuto 50, con el gol que empataba el encuentro y obligaba a los alemanes a sumar cuatro tantos más. Sin duda, Coro sabe encontrar el momento para hacerse notar.
