15 de septiembre de 2007

Spa-Francorchamps: velocidad hacia el título

Llega uno de los trazados mágicos del mundial de la Fórmula Uno. Tras caer del calendario la pasada campaña por motivos de remodelación del circuito, Spa llega en el mejor momento de la presente temporada. En Bélgica 2004, Michael Schumacher consiguió alcanzar su séptimo título mundial, que le coronaría como el mejor piloto de la historia de la Fórmula Uno. Y en la última aparición de Spa en el calendario (2005), Fernando Alonso conseguía un segundo puesto que le ayudaría dos semanas más tarde a alzar su primer título mundial. Sin duda, Spa vuelve a convertirse en un circuito clave para comenzar a conocer al futuro campeón.

Y es que el circuito de 'Eau Rouge' despierta todas las neuronas a los pilotos. Un circuito de campeones, como apuntaba el mítico piloto brasileño Ayrton Senna, muy exigente y en el que sólo pisan el acelerador a fondo los más valientes. Un circuito donde se alcanza una velocidad máxima de 330 kilómetros por hora y en el que se pisa el acelerador a fondo durante el 63% del circuito. En Bélgica, Fernando Alonso intentará olvidar la semana negra que le ha tocado vivir en su escudería, sancionada con la suspensión de todos los puntos del Mundial de Constructores y una histórica multa económica de 100 millones de dólares.

El piloto asturiano ya demostró en Monza que pisará fondo hasta conseguir su tercer título mundial. No será fácil. Hamilton, a pesar de todo, ha demostrado ser un gran piloto y, sin duda, apretará los dientes para defender su primera plaza. Y también está McLaren. La escudería sigue teniendo su favorito, y no es precisamente el bicampeón español. La lucha de Alonso será difícil, y primero tendrá que demostrar su valía en los más de siete kilómetros del circuito, a través de sus once curvas y las 44 vueltas que tendrá que dar para entrar en primera posición y dar un golpe al Mundial. Spa ha vuelto.